Ciencias Sociales y Humanidades

PK-MS-130-LE El autismo en la sociedad

Salud y Bienestar

Asesor: Claudia Aviña Ramirez

Pandilla Kids (3ro., 4to., 5to. y 6to. Año de primaria)

Resumen

Aún en el presente siglo, no es raro encontrar el uso de adjetivos como enigma, incógnita, acertijo o incluso misterio para referirse al trastorno del espectro autista, sin embargo, el autismo se encuentra de manera más frecuente dentro de nuestra sociedad. El paciente autista sufre en su desarrollo un grave desorden que afecta a la cognición, a la afectividad, a la comunicación y como consecuencia de ello a la socialización, este trastorno puede estar causado por diversos factores. Esta investigación aborda la línea de cómo incluir a una persona autista en la sociedad, y uno de los puntos más importantes es que el tratamiento de esta diversidad funcional debe comenzar lo antes posible después del diagnóstico. El pronóstico de las personas autistas es variable en función de la gravedad de los síntomas y de los problemas que puedan coexistir, un diagnóstico precoz y un tratamiento adecuado, influirá de forma determinante en la evolución de las personas con este trastorno. Lo primero que podemos hacer como sociedad para incluir a las personas autistas es tener RESPETO, así como crear conciencia en los diferentes entornos de cómo podemos ayudarlos por ejemplo: usar apoyo visual (dibujos), anticiparnos y comentarles si su rutina cambia para evitar la ansiedad, usar un lenguaje claro y directo, escucharlos, mostrarles la actividad o los quehaceres a realizar, estar atentos a una posible sobrecarga sensorial cuidando el volumen de la música, las luces excesivas, las texturas y olores, y no olvidar que las personas autistas se encuentran en este mundo.

Fig1: Inclusión de una persona autista

Fig1: Inclusión de una persona autista

 

Pregunta de Investigación

¿Cómo incluir a una persona autista dentro de la sociedad?

Planteamiento del Problema

Dentro de nuestra sociedad hay una carencia de valores hacia las personas con diversidad funcional hablando específicamente de las personas autistas no sabemos cómo integrarlas o hacerlas partícipes en la vida cotidiana de la sociedad.

Fig 2: Imagen de un puzzle hace referencia al cerebro de una persona autista.

Fig 2: Imagen de un puzzle hace referencia al cerebro de una persona autista.

Antecedentes

Fig3 Biblioteca Jose Vasconcelos

La palabra autismo deriva del pronombre griego autós ( = uno mismo) y designa la característica más llamativa en primera instancia del autista: su comportamiento centrado en sí mismo.

El concepto de “autismo” fue acuñado e introducido en la literatura especializada por el psiquiatra suizo Eugen Bleuler en el año 1911, como características concomitantes de las patologías esquizoides describió el retraimiento autista, como el rechazo del contacto con otras personas y un trastorno en su relación con la realidad. Treinta años más tarde en el año 1943, el psiquiatra infantil de nacionalidad norteamericana  Leo kanner presentó un informe sobre once niños que mostraban rasgos sorprendentes incluso desde el punto de vista psiquiátrico, rechazaban todo tipo de contacto, no hablaba absolutamente nada o lo hacían en un lenguaje propio y se preocupaban mucho de preservar sin cambios su entorno.

Autismo es un nombre que se ha popularizado de manera notable, permaneció muchos años en una relativa penumbra, pero a partir de varias reformulaciones lo que se agrupa bajo este nombre ha ido cambiando sensiblemente, al punto que algunos autores como Lynn Waterhouse (2013) afirman: “el autismo existe pero no sabemos lo que es”.

Lo primero que se debe comprender acerca del autismo es que se trata de un trastorno del desarrollo que ejerce una influencia duradera en todos los aspectos del desarrollo social, lingüístico, y cognitivo. Es un trastorno orgánico del cerebro y es probable que tenga un origen genético. Es un trastorno del desarrollo neurológico condicionante de una neuro variabilidad caracterizada por interacción social disminuida con deficiencia en el desarrollo de la comunicación a través del lenguaje verbal y no verbal e inflexibilidad en el comportamiento al presentar conductas repetitivas e intereses restringidos. El TEA se determina por déficits persistentes en la comunicación e interacción sociales en múltiples contextos, incluidos los de reciprocidad social, los comportamientos comunicativos no verbales usados para tal interacción y las habilidades para desarrollar, mantener y comprender las relaciones.

Se trata de un trastorno de alta prevalencia e incidencia, el cual ha sido subdiagnosticado en las últimas décadas. Sin embargo, las herramientas de las que se dispone en la actualidad y la investigación epidemiológica han hecho notar que este desorden es demasiado frecuente.

Fig 4: Símbolo internacional de las asociaciones del autismo.

La Asamblea General de las Naciones Unidas declaró por unanimidad el 2 de abril como el día mundial de la concienciación sobre el Autismo, para poner en relieve la necesidad de contribuir a la mejora de calidad de vida de las personas con este trastorno, a fin de poder llevar una vida plena y gratificante como parte integrante de la sociedad. Es importante mencionar que las instituciones de mayor prestigio e información especializada y estadística de salud, maneja actualmente 1 caso de autismo por cada 68 nacimientos, estimando así un incremento en la incidencia anual de 17%, la cual es 5 veces más frecuente en hombres que en mujeres. Cabe destacar que hasta el 46% de los niños afectados son víctimas de acoso escolar, bajo una conducta repetitiva e intencional, a efecto de intimidar, someter, amedrentar o atemorizar, emocional o físicamente, a la persona (bullying), según datos de la OMS. En México, la Comisión de Derechos Humanos de la Ciudad de México señaló que el autismo ha sido concebido a partir del modelo médico de la discapacidad. Por lo que considera necesario dejar de limitar el tema de la discapacidad a la atención de las deficiencias y contemplar la modificación de entornos a partir de las necesidades específicas de cada persona, para lograr su inclusión social.

La identificación temprana es muy importante, diferentes series de estudios indican que son los padres los primeros en identificar los “focos rojos” que alertan sobre el desorden, posteriormente en orden decreciente, son otros familiares, los que detectan un mal funcionamiento, además del personal de guarderías o maestras, así como médicos generales o pediatras. Los síntomas se reconocen normalmente entre los 12-24 meses de edad, pero no es una regla, puede ser antes o después.

Partiendo de un enfoque multidimensional, el pronóstico más honesto de un paciente con autismo es incierto. La calidad de vida de la persona con este desorden va a tener una proporcionalidad importante respecto del grado de involucramiento y el establecimiento de redes de apoyo que logre el médico.

Fig 5: Biblioteca José Vasconcelos

Niveles de Autismo

Nivel 1: requiere apoyo. Las personas en este nivel tienen dificultades en la comunicación social y en las interacciones sociales, así como en la flexibilidad del comportamiento. Además, pueden tener intereses restringidos y patrones repetitivos de comportamiento, pero pueden funcionar de manera independiente en la vida diaria con un apoyo mínimo.

Nivel 2: requiere apoyo substancial.  Las personas con autismo de este nivel necesitan más ayuda para comunicarse y para relacionarse con los demás. Por lo tanto, pueden tener problemas para adaptarse a los cambios en su entorno y presentar comportamientos repetitivos y estereotipados. También requieren más apoyo para llevar a cabo actividades de la vida diaria, como vestirse o preparar la comida.

Nivel 3: requiere apoyo muy substancial. Las personas con autismo de nivel 3 tienen un funcionamiento muy limitado y necesitan un alto nivel de apoyo en todos los aspectos de su vida. Además, presentan dificultades para hablar, para relacionarse con otras personas y para hacer actividades básicas.

El tratamiento debe ser altamente estructurado e incluir profesores de educación especial, terapia de lenguaje y logopedia, tratamiento ocupacional y entrenamiento en habilidades adaptativas.

El tratamiento conductual reduce los comportamientos no deseados, promueve el lenguaje y la interacción social, y además, aumenta habilidades que fomentan la inteligencia.

Fig 6: La persona autista, necesita ayuda afectiva para aprender.                       

Fig 7: Los cambios de los demás le producen ansiedad.

Fig 8: Los cambios de rutina representan un problema.

Fig 9: No les gustan las interrupciones.

Fig 10: Experimenta a menudo enojos.

Fig 10: Experimenta a menudo enojos.

Fig 13: Se sienten más atraídos por los objetos que por las personas.

Fig 14: Con ayuda puede reconocer las reglas.

Objetivo

Dar a conocer qué acciones se pueden realizar para mejorar la vida de las personas autistas en la sociedad.

Justificación

Debido a mi interés por conocer más a detalle la condición de las personas con TEA, y si como sociedad podemos contribuir a su inclusión.

Hipótesis

Si conocemos más sobre la condición de las personas con autismo, entonces seremos más conscientes y empáticos como sociedad.

Fig 15: El cerebro y su desorden

Método (materiales y procedimiento)

Fig 16: Entrevista a especialista.

Como parte de la metodología de este proyecto realizamos una entrevista a la psicóloga Nadia Hernández con el fin de conocer más detalles sobre este trastorno y para saber si es posible que las personas autistas pueden integrarse a la sociedad.

1.- ¿Qué es el autismo?

R = Afección relacionada con el desarrollo del cerebro.

2.- ¿Existen diferentes tipos de autismo? No, Si ¿Cuáles son?

R = Se clasifican en cuatro tipos diferentes:

  • Síndrome de Rett
  • Síndrome de Asperger
  • Trastorno desintegrado infantil o síndrome Heller
  • Trastorno generalizado del desarrollo no especificado.
  1. ¿En su experiencia, el autismo es cada vez más frecuente?

R = Si, a partir de los estudios que se han realizado cada vez se han diagnosticado a más personas.

4.- ¿Cuáles son las causas o los factores de riesgo del autismo?

R = No se sabe sobre una causa en específico, ya que es una afección cerebral, y el riesgo se relaciona con lo que se desconoce sobre el tema ya que no se sabe cómo tratar con personas con TEA.

5.- ¿Cómo se diagnostica el autismo?

R = El neurólogo hace el estudio que determina si hay y en qué grado.

6.- ¿A partir de qué se diagnostica el autismo, cuál es el paso a seguir?

R = Se sugiere dependiendo del diagnóstico, la intervención del neurólogo y del psicólogo.

7.- ¿Hay alguna cura o tratamiento para el autismo?

R = No, el autismo es una condición con la que se va a vivir todo el tiempo y lo que ayuda el tratamiento terapéutico es a dar herramientas para integrarse a la sociedad.

8.- ¿Tienen las personas con autismo limitada su capacidad intelectual?

R = En su mayoría no, a veces cuando se acompaña de T.D. o T.D.H. suele haber complicaciones para aprender.

9.- ¿Los niños con autismo pueden ir a la escuela?

R = Si, dependiendo del grado de T.E.A. que tenga y el acompañamiento adecuado.

10.- ¿Qué garantías ofrecen las terapias o los medicamentos para el autismo?

R = Ofrece una mejor capacidad para relacionarse con el ambiente y mejora la comunicación, así como la flexibilidad del pensamiento.

11.- ¿Qué pronóstico tiene el autismo? ¿Se puede ayudar a estas personas?

R = Si, la ciencia ha avanzado mucho y cada vez hay más información para poder apoyar a estas personas.

12.- ¿Con el tratamiento adecuado, el acompañamiento de la familia y la intervención de los especialistas adecuados, una persona autista puede incorporarse a la sociedad?

R = Si, si el T.A. no es un nivel muy avanzado puede incluirse en la sociedad.

13.- ¿Cómo sociedad qué acciones podemos realizar para incluir a las personas con autismo?

R = Se puede brindar información adecuada para concientizar a las personas.

Galería Método

Resultados

Los resultados derivados de esta investigación, nos indican que hay poca información sobre el autismo, que como sociedad desconocemos qué es, cuáles son los síntomas y cómo podemos ayudar a las personas con esta diversidad funcional para su interacción en las cosas cotidianas de la vida. La sociedad tiene que aprender a mirarlos como parte de un todo, su apreciación es diferente, pero pueden llegar a ser autónomos e independientes, a tener una mejor capacidad de relacionarse con los demás y poder interactuar en diferentes ambientes y situaciones.

 

Galería Resultados

Discusión

Conclusiones

El autismo es una alteración del desarrollo neurológico que incide en un funcionamiento atípico de la comunicación, la conducta, la integración sensorial y la interacción social, es importante saber y concientizarnos como sociedad que no es una enfermedad, es una manera diferente de interpretar las palabras, los colores, las formas y los sonidos del mundo que nos rodea, ya que la incidencia del autismo se incrementa 17% cada año y no podemos mirarlo como una circunstancia individual, es algo que de manera transversal afecta a nuestra sociedad, es parte de nosotros y deberíamos considerarlo en mayor o menor medida, pues aceptar y comprender las miradas diferentes de las personas con TEA, en nuestros entornos, en muchos ámbitos y contextos como familiar, terapéutico, educativo, de ocio, deportivo, social, facilitará su inclusión social.

Bibliografía

1.-Autismos¿Espectro o diversidad?

Autor: Juan Vasen

Editorial: Noveduc libros Ediciones Novedades Educativas de México.

1a Edición, Febrero 2015

 

2.- El Autismo

Autor: Hartmurt R. P.Janetzke

Editorial: Acento

1a Edición 1996, 2da Edición 1997.

 

3.- Convivir con el autismo

Autor: Mike Stanton

Editorial: Ediciones Pardos Ibérica SA

1a Edición 2000

 

4.- El espectro autista

Autor: Josep Tomás

Editorial: Ertes

1a edición 2002

 

5.- El autismo

Autor: Maria Paloszny

Editorial Trillas

1a Edición 200

Summary

Research Question

Problem approach

Background

Objective

Justification

Hypothesis

Method (materials and procedure)

Results

Discussion

Conclusions

Bibliography