Leonardo Ramos Sosa[1o Colibrí], José Rodolfo Montiel Martínez[1o Colibrí], Dea Anelisse Martínez Olvera[1o Colibrí], Zaid Ramírez Manríquez[1o Colibrí]
El té es la bebida más consumida en el mundo después del agua y cuenta con una larga tradición e historia que data de más de 5 mil años. Todos los pueblos del mundo han usado las plantas medicinales para atender sus problemas de salud, una gran mayoría lo sigue haciendo actualmente. Los médicos tradicionales y sus plantas medicinales han dejado de ser calificados negativamente y comienzan a establecerse programas y proyectos para la investigación, aplicación e industrialización de los productos. Las plantas medicinales son el recurso material más amplio y valioso de la medicina indígena tradicional. Su estudio es un tema recurrente en la historia de México, tarea muy compleja si se piensa en la enorme riqueza cultural florística del país, con esta investigación buscamos enseñar a nuestra comunidad cómo podemos crear nuestras propias bolsas de té, siendo una manera más orgánica, barata y libre de químicos, para nuestra investigación realizamos diversas encuestas, visitamos algunos viveros en donde nos dieron información importante de algunas plantas medicinales como sus propiedades y cuidados. La creación de las bolsas de té fue en 1908 según los datos que se tiene, y a pesar de ser algo tan sencillo vino a revolucionar la manera en la cual se tomaban las infusiones, cabe mencionar que las bolsitas que hoy en día conocemos no es muy distinto del que se usaba en aquella época. Esta es una tradición que la mayoría de los mexicanos aún llevamos muy en el corazón. ¿Cuántas veces has escuchado “con un tecito de manzanilla se te quita el dolor de panza” o “el té de limón con miel es buenísimo para la gripe?
¡Seguro que muchas!
Se tiene la percepción errónea de que las plantas son mucho más seguras que los medicamentos sintéticos, cuando en realidad pueden tener concentraciones letales de arsénico, plomo y mercurio; esto derivado de la contaminación química que puede existir en el agua al regar las plantas, los mismos químicos que se utilizan en ellas, sin embargo si se les da el uso correcto puede ayudar a controlar y prevenir diversas enfermedades, sin embargo al tener los conocimientos necesarios podemos consumirlas de forma segura en distintas infusiones y así ayudar a sentirnos mejor.
La herbolaria, es conocida como el conjunto de conocimientos relativos a las propiedades curativas de plantas, hierbas y árboles.
El uso de plantas medicinales en México es tan antiguo como su historia misma,”Libellus de Medicinalibus Indorum Herbis” constituye el referente bibliográfico sobre la recolección de plantas y sus usos medicinales más antiguo de nuestro país, el cual data de 1552. Fue escrito en náhuatl por Martín de la Cruz, un indígena xochimilca.
La herbolaria mexicana surgió en la época prehispánica, desde la religión que se practicaba en esa época. Así, los pueblos concebían las enfermedades como productos de las acciones de sus dioses. Trataban de encontrar una cura en la naturaleza y así generar grandes avances en el estudio de las plantas medicinales.
El hombre desde sus orígenes hasta la actualidad ha aprovechado la propiedad curativa de las plantas para prevenir y aliviar enfermedades, lo cual nos dice que la herbolaria es la medicina más antigua y probada del mundo.
En nuestro país, la herbolaria tiene su umbral en la época precolombina, periodo en el cual aztecas, mayas y purépechas, desarrollan un vasto conocimiento herbolario con fines medicinales constituyéndose como el más completo y complejo del mundo, debido a la riqueza natural de nuestro territorio.
Es importante mencionar que las comunidades indígenas, son herederas del conocimiento herbolario el cual se ha mantenido por la práctica y la transmisión oral entre los integrantes de los diferentes grupos étnicos.
Generalmente, cuando hablamos de té, pensamos en países de Asia o Londres, cositas ricas francesas o incluso el denso sabor de África, pero nunca pensamos en lo que México ha aportado al té.
Desde nuestros ancestros prehispánicos, la herbolaria es un recurso que ha estado presente para la brujería y la medicina, y hoy en día sigue presente en todas nuestras alacenas, porque nadie puede negar que se han tomado un té de manzanilla cuando les duele el estómago, o un té de tila para calmar los nervios.
Existen muchas hierbas que hasta la fecha se siguen usando, aunque muchas de ellas tienes que encontrarlas en algunos mercados de brujería o con gente especializada en el tema, y prácticamente pueden curar de todo, y muchas de ellas pueden ser preparadas de la manera que más nos gusta, como infusión para extraerles todas sus propiedades y hacerlas una bebida interesante.
No existe una fecha exacta de cuando le empezamos a llamar té a estos brebajes mágicos y dejamos de tenerlos como algo sagrado, pero probablemente viene con la conquista, además de introducción de plantas como la manzanilla, tamarindo y la jamaica, que son básicas para nuestra vida cotidiana y las infusiones más populares que tomamos.
Y no podemos olvidar el rico ponche de frutas que cada navidad nos alegra el corazón con esa increíble extracción de tejocotes, manzana, caña y amor (que tampoco es una bebida mexicana, pero la adoptamos para no dejarla ir)
Desde hace mucho tiempo el consumo de té en México está relacionado con la medicina tradicional, curando por medio de rituales y la administración de plantas medicinales, por medio de tés, que pueden aliviar todo mal del cuerpo y del espíritu.
Este conocimiento va pasado de generación en generación, por medio de escritos y de boca en boca en familiares y conocidos hasta nuestros días.
Hoy el mundo del té en México sigue un eterno remix entre la herbolaria curativa (de esa sí que tenemos antecedentes culturales), la tendencia del bienestar y los detalles de sofisticación. A pesar de que cada vez está más claro que se llama té a las hojas para infusión derivadas de la Camelia sinensis, las personas siguen pidiendo en los restaurantes té esperando escuchar manzanilla, hierbabuena y canela. Los meseros y los establecimientos en general, ya mejor no discuten.
Realizar bolsas de tés con ingredientes 100% naturales y amigables con el medio ambiente que nos ayuden para el buen funcionamiento del sistema digestivo.
Garantizar una vida sana y promover el bienestar en todas las edades.
Nos interesa saber cómo se hace un té, su preparación, además identificar materiales económicos, accesibles y bolsitas reutilizables y duraderas que nos ayude a mejorar nuestra salud y a cuidar el medio ambiente.
Si conocemos los beneficios de las plantas medicinales de nuestro país podemos conocer cuáles nos sirven para realizar diferentes infusiones de manera orgánica, económica y funcional utilizando bolsitas realizadas por nosotros mismos.
Para nuestra investigación documental se acudió a la biblioteca “José María Morelos y Pavón” ubicada en Av. Zarzaparrilla, Los Héroes Coacalco donde se buscaron libros referentes a Herbolaria.
Visitamos los viveros de Tultepec, Coacalco y Xochimilco; así como tianguis y mercados donde venden hierbas para preparar té con el fin de localizar las plantas medicinales que ocuparíamos para el beneficio del sistema digestivo.
Los alumnos entrevistaron a una población de 100 personas que nos ayudaron a recopilar información y poder sacar estadísticas de sus respuestas.
Cada alumno se dedicó observar y realizar el proceso de deshidratación de una planta medicinal para posteriormente embolsarlo y probar su eficacia.
En cada planta medicinal se procedió a realizar los siguientes pasos:
Para realizar las bolsitas de te seguimos los siguientes pasos:
Se utilizaron las telas: gasa, satín, velo y gasa.
Derivado de las encuestas se pudo saber que el 80% ha utilizado plantas medicinales para tratar alguna enfermedad.
El té que más consumen las personas es el de manzanilla y lo utilizan para malestares estomacales, el 61% no cultiva plantas medicinales en casa, la frecuencia con que toman un té es 1 vez a la semana o al mes y el 70% les interesa crear sus propias bolsas de té.
Contemplamos 4 opciones de material para las bolsitas de té (gasa, satín, velo y popelina) las cuales son excelentes opciones para considerar. Solo se pudo observar que la gasa tiene una probabilidad de que las plantas medicinales se lleguen a salir por los pequeños orificios que tiene este mismo material; sin embargo, es una forma de utilizar gasas si tenemos en casa y posteriormente colar al pasarlo a una taza o vaso.
Las cuales son excelentes opciones para considerar.
Solo se pudo observar que la gasa tiene una probabilidad de que las plantas medicinales se lleguen a salir por los pequeños orificios que tiene este mismo material; sin embargo, es una forma de utilizar gasas si tenemos en casa y posteriormente colar al pasarlo a una taza o vaso.
Los otros materiales fueron una opción viable para reutilizar las bolsitas más de 10 veces, demostrando que son una buena opción; ya que se desempeñaron muy bien al realizar el filtrado dejando salir las propiedades de las plantas medicinales, destacando el velo ya que al ser una tela 100% poliéster es menos probable que desarrolle bacterias-hongos y que se dañe al lavado a largo plazo y/o cambie de color.
Para realizar una comparativa entre un té realizado con plantas medicinales realizado con por nosotros y un té industrializado, pesamos una bolista de té de hierbabuena, el cual peso 1.2g.
En una bolsita de velo pusimos 1.2g de té de hierbabuena realizado por nosotros y lo dejamos unos minutos.
Al compararlos el té natural está listo más rápido, además de que el color y sabor son mas intensos y se parecen más a los aromas de la planta que el industrializado.
Las plantas que se pudieron estudiar fueron manzanilla, hierbabuena, hinojo, tomillo, menta y orégano.
Se tenía contemplado buscar las plantas de Jengibre, Alcachofa y Anís; pero no se pudieron encontrar estas plantas en maceta; ya que el Jengibre solo se encuentra la raíz; pero la planta como tal con sus raíces no se pudo localizar.
Aprendimos la importancia de cada planta medicinal, su forma, sus características, texturas, propiedades, beneficios, sus cuidados, riego, el cómo deshidratarlas y guardarlas en las bolsas de té que hicimos; buscando el material adecuado para su conservación y reutilización.
Es importante que desde niños se fomente esos cuidados por las plantas y conocer sus beneficios para poder ayudar a mejorar nuestra salud; con productos que ayuden a nuestra vida diaria y economía además de ser responsables con el medio ambiente y no fomentar los productos desechables de un solo uso.
Tea is the most consumed drink in the world after water and has a long tradition and history that dates back more than 5,000 years. Every civilization in the world has used medicinal plants for their health problems, a large majority continue to do so today. Traditional doctors and medicinal plants have ceased to be classified negatively and now programs and projects for the research, application and industrialization of these products begin to be established. Medicinal plants are the largest and most valuable material resource of traditional indigenous medicine. Its study is a recurring theme in the history of Mexico, a very complex task if you think about the enormous floristic cultural richness of the country, with this project research we seek to teach our community how we can create our own tea bags, being a more organic, cheap and chemical-free way, for our research we conducted various surveys, we visited some nursery gardens where they gave us important information about some medicinal plants such as their properties and care. The creation of the tea bags was in 1908 according to the data we have, and despite being something so simple it came to revolutionize the way in which the infusions were taken, it is worth mentioning that the bags that we know today are not very different from the ones used at that time. This is a tradition that most Mexicans still carry in our hearts. How many times have you heard “with a little chamomile tea you get rid of the stomachache” or “lemon tea with honey is great for the flu? I’m sure there are many!
